La motivación como aliada para aprender un idioma
¡Hoy voy a poder con todo!
Quizás os estaréis preguntando a qué se debe tanta energía y entusiasmo y es que, permitidme que os diga, para aprender un idioma esta será vuestra principal arma y más fiel amiga: la motivación.
Antes, solía bastar con ir al colegio, a la universidad, aprender algunas destrezas básicas y construir lo que llamábamos una carrera. Pero ahora, en una realidad en la que la información se actualiza cada hora, cada segundo, y que está disponible para cualquier persona, desde cualquier lugar, todos debemos continuar aprendiendo día a día. Y en el ámbito de los idiomas podríamos decir que esta idea se hace aún más relevante.
El éxito de cualquier acción a menudo depende del grado en que cada uno luche por conseguir su objetivo, junto con su deseo de lograrlo.
¿Qué impulsa nuestra motivación para aprender una lengua extranjera?
Aprender un idioma es más que darle un empujón a nuestro curriculum o adquirir algunos conocimientos básicos para viajar y comunicarse en un entorno multicultural. Aprender un idioma reforzará tu inteligencia, te hará ser más decisivo e incluso te permitirá aprender mejor tu propia lengua materna.
Como ya bien sabréis, muchos son ya los estudios psicológicos que han demostrado la gran ventaja para el proceso cognitivo que supone saber dos o más lenguas. El cerebro de una persona bilingüe opera de una forma diferente al de personas que solo hablan una lengua, y estas diferencias ofrecen grandes beneficios mentales. Por ejemplo, las personas bilingües (o políglotas) tienen la destreza de cambiar de un sistema lingüístico a otro a nivel oral y escrito, lo cual permite desarrollar la destreza de la multitarea o multifunción (multitasking skills) y desarrolla la memoria. Los beneficios mentales pueden ir aún más allá, y es que varios estudios han demostrado que aprender una lengua extranjera retrasa la aparición de enfermedades como el Alzheimer y la demencia.
Sea cual sea tu motivación, desde viajar, comunicarse en entornos globales, por satisfacción personal, trabajo, salud, etc., poco a poco descubrirás que aprender un idioma es más gratificante de lo que podemos llegar a imaginar. Y, mientras que es cierto que es mejor aprender desde pequeños (the earlier, the better), nunca es demasiado tarde para comenzar (it’s never too late), como demuestra la noción de la plasticidad cerebral: el cerebro del ser humano aprende constantemente, y eso significa que es posible aprender un nuevo idioma a cualquier edad.
Entonces, si aún no has dado el salto, ¿a qué esperas? En la siguiente infografía esbozamos los principales mitos sobre aprender inglés. Esperamos poder desmontarlos para ayudarte a dejar las excusas a un lado y empezar con aquello que siempre quisiste hacer pero nunca encontraste el momento. Pero recuerda, todo aprendizaje que comiences por ti mismo debe construirse en torno a la motivación.
A continuación, incluimos un resumen en castellano para aquellos valientes que quieran comenzar a aprender inglés o para todos aquellos que, aun teniendo algunas nociones de la lengua, necesiten continuar avanzando en su aprendizaje.
7 mitos sobre el aprendizaje del inglés
1.- El inglés es difícil
¡Falso! Tan solo es difícil aprender una lengua si no quieres hacerlo. Aprender una lengua lleva tiempo, dedicación y MOTIVACIÓN.
2.- Solo los niños pueden aprender a hablar un idioma bien
¡Falso! Los adultos tan solo necesitan el deseo de un niño de experimentar y comunicarse, sin el miedo al ridículo.
3.- Necesitas hablar para aprender y no tengo a nadie con quien hablar
¡Falso! Hablar es a menudo el objetivo de aprender un idioma, pero hablar puede esperar. No necesitas hablar para aprender, necesitas aprender para hablar.
4.- Es malo cometer errores
¡Falso! Los errores son necesarios para continuar aprendiendo, pero necesitas ser corregido para poder mejorar y evitar esos errores la próxima vez.
5.- Tienes que tener un don para los idiomas
¡No, no tiene por qué! Cualquiera que quiera aprender, puede aprender. Todo lo que necesitas es actitud, no aptitud.
6.- Tienes que vivir donde se habla la lengua
¡Falso! Con Internet, la información está disponible para cualquiera en cualquier idioma. Donde vivas no es un obstáculo. Además, puedes seguir asistiendo a tus clases allá donde vayas con nuestra escuela de inglés online.
7.- Quiero aprender pero no tengo tiempo
¿Qué hay del tiempo que pasas desplazándote hasta el trabajo, haciendo cosas por la casa, dando un paseo…? ¿Por qué no usar ese tiempo para escuchar un podcast en inglés en tu iPod o Mp3, ver la televisión en versión original mientras descansas en el sofá o escuchar música en inglés mientras conduces?